Los sietes del Eneagrama tienen la necesidad motivacional de vivir la vida al máximo y evitar el sufrimiento. Valoran profundamente su libertad y se enfocan en mantener una actitud optimista, dejándose inspirar y aprovechando las oportunidades que se les presentan. Abordan la vida como una gran aventura, disfrutando de ser juguetones y espontáneos. En su mejor versión, los demás percibirán a los sietes como personas satisfechas y serenas, capaces de abrazar la sobriedad y estar plenamente presentes consigo mismos y con el mundo que los rodea. Sin embargo, en un nivel menos saludable, pueden ser percibidos como impulsivos, poco comprometidos y desenfocados, distraídos por su búsqueda insaciable de satisfacción y el temor a perderse de algo.
Diálogo interno
"¡El futuro está repleto de oportunidades emocionantes y quiero experimentarlas todas! Estoy bien, me merezco cumplir mis deseos. ¿Cuál es el siguiente paso? Tengo que avanzar, necesito sentirme libre".
Los Sietes poseen una mente ágil que salta entre ideas y las conecta con facilidad. Este tipo desea dedicar su energía y tiempo a aquello que les apasiona, respondiendo al instante a cualquier estímulo. Así, el estilo de pensamiento de los Sietes combina un veloz procesamiento mental con una elevada necesidad de estimulación intelectual. Anhelan tener opciones y detestan sentir que sus alternativas se ven limitadas o que están siendo coartados de algún modo. Esta forma de pensar permite a los Sietes acumular un amplio abanico de conocimientos en muy diversos campos. Estos saberes generalistas pueden impulsar su creatividad e innovación, ya que disponen de un vasto arsenal de información para relacionar y aprovechar. A los Sietes les estimula su capacidad para generar y compartir multitud de ideas con los demás. Cuando se topan con datos nuevos, los procesan e integran velozmente, aprendiendo a menudo sobre la marcha y en plena acción.
Los sietes se aburren fácilmente y las tareas monótonas o repetitivas pueden desanimarlos. Por ello, buscan activamente la emoción y prueban cosas nuevas, a menudo dejando tareas inconclusas al lanzarse a algo diferente. Los sietes desean generar impulso en la vida y actuar con determinación para mantener las cosas en marcha. Disfrutan de la descarga de adrenalina que viene con la emoción y el probar algo nuevo. Bajo presión, los sietes realizarán múltiples tareas simultáneamente, harán malabares con sus planes y pueden tender a abarcar más de lo realista. El cuerpo del siete es probablemente tan activo como su mente. Esta personificación de la energía puede manifestarse como un lenguaje corporal inquieto y un movimiento constante; a la mayoría de los sietes no les gusta quedarse quietos por más de un par de minutos. A los demás les puede parecer que los sietes están intranquilos, siempre haciendo malabares con sus tareas o yendo a algún otro lugar.
Los sietes se sintonizan con el lado positivo del espectro emocional y su forma de expresarse suele ser optimista y llena de energía. Es probable que los demás perciban a los sietes como personas alegres, esperanzadas y entusiastas. Cuando los sietes experimentan o se topan con emociones incómodas y negativas como la ansiedad, el aburrimiento, el miedo o la tristeza, su respuesta instintiva es enfocarse en posibilidades y planes positivos para el futuro. Esto les permite escapar y sobreponerse a la incomodidad. Los sietes también pueden ser bastante hábiles para "reinterpretar" las experiencias negativas y enmarcarlas como oportunidades positivas o lecciones de vida. Esta forma de racionalizar puede dificultarles asumir completamente la responsabilidad personal cuando las cosas salen mal, pero también les ayuda a mantenerse en un camino positivo. A los sietes no les gusta que se cuestionen sus capacidades y pueden enojarse cuando la gente lo hace. Es probable que se esfuercen activamente por cambiar el estado de ánimo hacia algo más positivo y ligero cuando las cosas se ponen densas, o intenten alivianar el ambiente contando chistes.
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Tipo 7 Ala 6: Tipo 7 Ala 8:La búsqueda de libertad y la evitación del malestar del Eneagrama Siete se manifiestan de manera diferente en los tres subtipos.
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